martes, 2 de octubre de 2018

El Ángel de la Guarda o Ángel custodio criatura que viene de Dios para servir al ser humano guiándonos y cuidándonos.


Éxodo 23, 20-23  
Así dice el Señor:«Voy a enviarte un ángel por delante, para que te cuide en el camino y te lleve al lugar que he preparado.  Respétalo y obedécelo. No te rebeles, porque lleva mi nombre y no perdonará tus rebeliones. Si lo obedeces fielmente y haces lo que yo digo, tus enemigos serán mis enemigos, y tus adversarios serán mis adversarios.  Mi ángel irá por delante.»
Palabra de Dios
Te alabamos Señor

Salmo 90 “ Que sus ángeles te cuiden en todos tus caminos “

Mateo 18, 1-5.10  
En aquel momento, se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron:  «¿Quién es el más importante en el reino de los cielos?» Él llamó a un niño, lo puso en medio y dijo: «Os aseguro que, si no volvéis a ser como niños, no entraréis en el reino de los cielos. Por tanto, el que se haga pequeño como este niño, ése es el más grande en el reino de los cielos. El que acoge a un niño como éste en mi nombre me acoge a mi. Cuidado con despreciar a uno de estos pequeños, porque os digo que sus ángeles están viendo siempre en el cielo el rostro de mi Padre celestial. »
Palabra de Dios

Sabías que desde que estamos en el vientre de nuestra madre está presente el angel de la Guarda?

Desde pequeños nuestras madres nos enseñaron la oración del ángel de la guarda y hasta teníamos cerca de nuestra cama una imagen del ángel quien nos cuida.

Pero realmente creemos en estas criaturas hermosas creadas por Dios ? sabes cual es la misión que tiene el ángel de la guarda?   como es tu relación con el angel de la guarda? cómo podemos aprovechar nuestro ángel de la guarda?

A continuación Aquí están las 4 enseñanzas del Santo Padre para aprender a relacionarnos mejor con nuestro Ángel de la Guarda.

1. El Ángel Guardián existe, no es una fantasía

En el año 2014, el Papa Francisco expresó durante la homilía de la Misa en la Casa de Santa Marta que el Ángel Guardián sí existe, no es una fantasía sino un compañero que Dios ha puesto a cada uno en el camino de la vida.
“Echar a nuestro ángel del camino es peligroso, porque ningún hombre, ninguna mujer puede aconsejarse a sí mismo. Yo puedo aconsejar a otro, pero no puedo aconsejarme a mí mismo. Está el Espíritu Santo que me aconseja, está el ángel que me aconseja. Por eso tenemos necesidad. Esta no es una doctrina sobre los ángeles un poco fantasiosa: no, es realidad. Lo que Jesús, lo que Dios ha dicho: ‘Yo envío un ángel ante ti para custodiarte, para acompañarte en el camino, para que no te equivoques’”, expresó.

2. Los ángeles luchan contra el demonio

El 29 de septiembre de 2014 el Papa dijo a Radio Vaticana que Satanás presenta las cosas como si fueran buenas, pero su intención es la de destruir al hombre; y los ángeles luchan contra el demonio y nos defienden.
“Defienden al hombre y defienden al Hombre-Dios, al hombre superior, Jesucristo que es la perfección de la humanidad, el más perfecto. Por esto la Iglesia honra a los ángeles, porque son los que estarán en la gloria de Dios –están en la gloria de Dios– porque defienden el gran misterio escondido de Dios, es decir que el Verbo ha venido en la carne”, destacó.

3. Para escuchar a nuestro ángel debemos ser dóciles

El 2 de octubre de 2015 el Papa dijo en la homilía de la Misa de la Casa de Santa Marta que “el cristiano debe ser dócil al Espíritu Santo. La docilidad del Espíritu Santo comienza con esta docilidad a los consejos de este compañero de camino”.
Para ser dóciles, aconsejó el Papa, hay que hacerse pequeño, como niños. “Pidamos hoy al Señor la gracia de esta docilidad, de escuchar la voz de este compañero, de este embajador de Dios que está junto a nosotros en Su nombre, que nos sostiene con su ayuda”.

4. Al Ángel de la Guarda se le debe respeto porque siempre nos aconseja

En la misma homilía el Santo Padre aseguró que el Ángel de la Guarda “está siempre con nosotros” y que “el Señor nos dice: ‘¡Ten respeto por su presencia! Escuchar su voz, porque él nos aconseja”.
También dijo que nuestro ángel es “un amigo que no vemos, pero que escuchamos”. Un amigo que un día “estará con nosotros en el Cielo, en la alegría eterna”.
“Y cuando nosotros, por ejemplo, hagamos una maldad y pensemos que estamos solos: ‘no, él está’. Cuando sentimos la inspiración: ‘haz esto… esto es mejor… esto no se debe hacer…’ ¡Escucha! ¡No te rebeles a él!”, manifestó.

También hay otra experiencia del Padre Pío de Pietrelcina, quien tenía una relación muy cercana con su ángel de la guarda.

Aquí 5 hechos que, según la tradición, tal vez no sabías del Padre Pío y su ángel guardián.

1.-  Creía que todos podían verlo

La Obra de los Santos Ángeles –asociación católica que propaga esta devoción y cuyos estatutos han sido aprobados por la Santa Sede– indica que desde pequeño, el P. Pío comenzó a tener visiones de su ángel guardián, Jesús y María. Su madre llegó a decir que él pensaba que todo el mundo podía verlo.

2.- Juntos contra el demonio

En ocasiones, el demonio manchaba con borrones las cartas que le llegaban de su confesor y siguiendo el consejo de su ángel custodio, el santo rociaba con agua bendita las misivas antes de abrirlas y así podía leerlas.

3.- Traducía las cartas

Si recibía alguna carta escrita en francés, el ángel custodio fungía de traductor. Una vez el Padre Pío escribió: “si la misión de nuestro Ángel Custodio es importante, la del mío es ciertamente más amplia, porque debe hacer también de maestro en la traducción de otras lenguas” (Carta I, 304).

4.- Lo despertaba y rezaba con él

El santo fraile capuchino escribió: “Por la noche, al cerrárseme los ojos, veo bajarse el velo y abrirse delante el paraíso; y, confortado con esta visión, duermo con una sonrisa de dulce felicidad en los labios y con una gran tranquilidad en la frente, en espera de que mi pequeño compañero de mi infancia venga a despertarme y, de esta forma, elevar juntos las laudes matutinas al amado de nuestros corazones” (Carta I, 308).

5.- Hablaba con otros ángeles de la guarda

“Si me necesitas –solía decir el santo a sus hijos espirituales–, mándame tu ángel custodio”.
Cierto día el fraile capuchino Alessio Parente se acercó al Padre Pío con algunas cartas en la mano para hacerle unas consultas, pero este no pudo atenderlo.
Más adelante, el sacerdote de los estigmas lo llamó y le dijo: “¿No has visto todos aquellos Ángeles que estuvieron aquí alrededor de mí? Fueron los Ángeles de la Guarda de mis hijos espirituales que vinieron a traerme sus mensajes. Tuve que darles las respuestas rápidamente”.
El venerado Padre Pío de Pietrelcina siempre reconoció y agradeció la función de “mensajero” del Ángel de la guarda y por ello recomendaba su devoción.

En conclusión, los ángeles de la guarda son criaturas creadas por Dios para el servicio del ser humano porque ellos nos guían y cuidan. Su misión es ayudarnos a alcanzar la santidad a la que estamos llamados, esto significa hacer la voluntad del Padre. Es por eso que les debemos respeto y obediencia porque ellos están presente desde que nacemos hasta el dia de nuestra muerte. Pidamosle a Dios que nos ayude a ser dóciles a las buenas inspiraciones de nuestro ángel de la guarda para que aprendamos su manera de adorar y de obedecer a Dios, que su belleza nos recuerde el gran amor que nos tienes como Padre, Amen, Amen, Amen.

Dios te bendiga,

Alabados sea Jesucristo!!!

Tarea: Reza la Oracion del Angel de la Guarda con devoción.



     

Sandra Yudy Zapata Escudero

 -- 
 Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...

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Santa Misa


Lectio Divina


QUE TE GUARDEN EN TUS CAMINOS
A sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos. Den gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas que hace con los hombres. Den gracias y digan entre los gentiles: «El Señor ha estado grande con ellos.» Señor, ¿qué es el hombre para que le des importancia, para que te ocupes de él? Porque te ocupas ciertamente de él, demuestras tu solicitud y tu interés para con él. Llegas hasta enviarle tu Hijo único, le infundes tu Espíritu, incluso le prometes la visión de tu rostro. Y, para que ninguno de los seres celestiales deje de tomar parte en esta solicitud por nosotros, envías a los espíritus bienaventurados para que nos sirvan y nos ayuden, los constituyes nuestros guardianes, mandas que sean nuestros ayos.

A sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos. Estas palabras deben inspirarte una gran reverencia, deben infundirte una gran devoción y conferirte una gran confianza. Reverencia por la presencia de los ángeles, devoción por su benevolencia, confianza por su custodia. Porque ellos están presentes junto a ti, y lo están para tu bien. Están presentes para protegerte, lo están en beneficio tuyo. Y, aunque lo están porque Dios les ha dado esta orden, no por ello debemos dejar de estarles agradecidos, pues que cumplen con tanto amor esta orden y nos ayudan en nuestras necesidades, que son tan grandes.

Seamos, pues, devotos y agradecidos a unos guardianes tan eximios; correspondamos a su amor, honrémoslos cuanto podamos y según debemos. Sin embargo, no olvidemos que todo nuestro amor y honor ha de tener por objeto a aquel de quien procede todo, tanto para ellos como para nosotros, gracias al cual podemos amar y honrar, ser amados y honrados.

En él, hermanos, amemos con verdadero afecto a sus ángeles, pensando que un día hemos de participar con ellos de la misma herencia y que, mientras llega este día, el Padre los ha puesto junto a nosotros, a manera de tutores y administradores. En efecto, ahora somos ya hijos de Dios, aunque ello no es aún visible, ya que, por ser todavía menores de edad, estamos bajo tutores y administradores, como si en nada nos distinguiéramos de los esclavos.

Por lo demás, aunque somos menores de edad y aunque nos queda por recorrer un camino tan largo y tan peligroso, nada debemos temer bajo la custodia de unos guardianes tan eximios. Ellos, los que nos guardan en nuestros caminos, no pueden ser vencidos ni engañados, y menos aún pueden engañarnos. Son fieles, son prudentes, son poderosos: ¿por qué espantarnos? Basta con que los sigamos, con que estemos unidos a ellos, y viviremos así a la sombra del Omnipotente.
RESPONSORIO    Sal 90, 11-12. 10
R. A sus ángeles ha dado órdenes para que te guarden en tus caminos; * te llevarán en sus palmas, para que tu pie no tropiece en la piedra.
V. No se te acercará la desgracia, ni la plaga llegará hasta tu tienda.
R. Te llevarán en sus palmas, para que tu pie no tropiece en la piedra.

ORACIÓN.
OREMOS,
Dios, Padre misericordioso, que, en tu providencia inefable, te has dignado enviar, para nuestra guarda, a tus santos ángeles, concede a quienes te suplican ser siempre defendidos por su protección y gozar eternamente de su compañía. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.
Amén

lunes, 1 de octubre de 2018


Hay que volver a los valores como es el amor, confianza y gratitud hacia el Buen Dios.




Job 1, 6-22
Un día, fueron los ángeles y se presentaron al Señor; entre ellos llegó también Satanás.
El Señor le preguntó: "¿De dónde vienes?"
El respondió: "De dar vueltas por la tierra."
El Señor le dijo: "¿Te has fijado en mi siervo Job? En la tierra no hay otro como él: es un hombre justo y honrado, que teme a Dios y se aparta del mal."
Satanás le respondió: "¿Y crees que teme a Dios de balde? ¡Si tú mismo lo has cercado y protegido, a él, a su hogar y todo lo suyo! Has bendecido sus trabajos, y sus rebaños se ensanchan por el país. Pero extiende la mano, daña sus posesiones, y te apuesto a que te maldecirá en tu cara."
El Señor le dijo: "Haz lo que quieras con sus cosas, pero a él no lo toques."
Y Satanás se marchó.
Un día que sus hijos e hijas comían y bebían en casa del hermano mayor, llegó un mensajero a casa de Job y le dijo: "Estaban los bueyes arando y las burras pastando a su lado, cuando cayeron sobre ellos unos sabeos, apuñalaron a los mozos y se llevaron el ganado. Sólo yo pude escapar para contártelo."
No había acabado de hablar, cuando llegó otro y dijo: "Ha caído un rayo del cielo que ha quemado y consumido tus ovejas y pastores. Sólo yo pude escapar para contártelo."
No había acabado de hablar, cuando llegó otro y dijo: "Una banda de caldeos, dividiéndose en tres grupos, se echó sobre los camellos y se los llevó, y apuñaló a los mozos. Sólo yo pude escapar para contártelo."
No había acabado de hablar, cuando llegó otro y dijo: "Estaban tus hijos y tus hijas comiendo y bebiendo en casa del hermano mayor, cuando un huracán cruzó el desierto y embistió por los cuatro costados la casa, que se derrumbó y los mató. Sólo yo pude escapar para contártelo."
Entonces Job se levantó, se rasgó el manto, se rapó la cabeza, se echó por tierra y dijo: "Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré a él. El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó, bendito sea el nombre del Señor." A pesar de todo, Job no protestó contra Dios.
Palabra de Dios
Te alabamos Señor


Hoy la primera lectura nos trae el libro de Job. Algunos lo conocemos como el Padre de la paciencia y es verdad este hombre da testimonio de paciencia cuando se le viene encima uno y otro padecimientos.

Comienza la lectura diciéndonos que un día, fueron los ángeles y se presentaron al Señor; entre ellos llegó también Satanás. El Señor le preguntó: "¿De dónde vienes?" El respondió: "De dar vueltas por la tierra." El Señor le dijo: "¿Te has fijado en mi siervo Job? En la tierra no hay otro como él: es un hombre justo y honrado, que teme a Dios y se aparta del mal." Satanás le respondió: "¿Y crees que teme a Dios de balde? ¡Si tú mismo lo has cercado y protegido, a él, a su hogar y todo lo suyo! Has bendecido sus trabajos, y sus rebaños se ensanchan por el país. Pero extiende la mano, daña sus posesiones, y te apuesto a que te maldecirá en tu cara.". El Señor le dijo: "Haz lo que quieras con sus cosas, pero a él no lo toques.".

Si leemos esta lectura podemos sorprendernos porque pareciera que ese Dios que conocemos amoroso, tierno y protector permite que le lleguen todas esas desgracias a este hombre tan bueno como es Job. Entonces cómo entender esta lectura?

Cual es la actitud de Job? es mesurada y serena. Pareciera que no pierde dominio de sí. Reconoce la triste realidad que está viviendo y no maldice. Job se apoya en una sola certeza: todo viene de Dios. Esto lo vemos cuando Job dice” Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré a él. El Señor me lo dio, el Señor me lo quitó, bendito sea el nombre del Señor.".

Job reconoce que hay que permanecer con el Señor: cuando las cosas salen bien y cuando salen mal. Dios no deja de ser Dios porque no entendamos sus planes o porque esos planes pospongan nuestras certezas o deseos. Hay que ser confiar en Dios porque a veces permite muchas cosas en nuestra vida. Claro está que hay otras cosas que desconciertan como las violaciones, el maltrato infantil, asesinatos y tantas atrocidades que suceden a nuestro alrededor, todo eso es producto de la maldad del hombre, de haberse alejado de Dios.

Pidámosle al Señor que permanezcamos en fidelidad ante El, que nos regale su sabiduría divina para permanecer serenos y no perder la cordura ante las dificultades. También que por su gracia nos ayude a crecer más en la Fe porque detrás de una dificultad hay una gran lección de vida para nosotros, es solo mirar con los ojos de la fe. En esto fue sabio Job.

Salmo 16 "Inclina el oído y escucha mis palabras"

Lucas 9, 46-50
En aquel tiempo, los discípulos se pusieron a discutir quién era el más importante. Jesús, adivinando lo que pensaban, cogió de la mano a un niño, lo puso a su lado y les dijo: "El que acoge a este niño en mi nombre, me acoge a mí; y el que me acoge a mí, acoge al que me ha enviado. El más pequeño de vosotros es el más importante".
Juan tomó la palabra y dijo: "Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre, y, como no es de los nuestros, se lo hemos querido impedir". Jesús les respondió: "No se lo impidáis: el que no está contra vosotros, está a favor vuestro".
Palabra de Dios
Te alabamos Señor


Hoy el evangelio vemos cómo Jesús presenta a un niño como ejemplo de lo que significa disponerse para el Reino, es decir, preparar el terreno para que Dios reine.

En la época de Jesús los niños eran despreciados porque no aportaban mucho ni en conocimientos, ni en fuerza, ni en trabajo. Jesús toma como modelo a esos "descartados" para decir dos cosas. Primera, que recibir a un despreciado es recibir al mismo Jesús. Por lo mismo, el que busca ser "más" y para eso humilla a los que son "menos" jamás entenderá el Evangelio. En segundo lugar, en dónde está la verdadera grandeza: quien descubre este "secreto" del Evangelio es realmente grande y trae los cambios verdaderamente grandes.

Hoy nuestra iglesia celebra la memoria de la Santa Teresita del Niño Jesús. Esta Santa nos enseña a que debemos de volver a los valores fundamentales amor, confianza y gratitud hacia el Buen Dios.

Teresita fue huérfana de madre a muy temprana edad; desde el vacío y necesidad de Teresita una de sus hermanas ocupa ese lugar de su madre. Sucedió que su hermana sintió el llamado más profundo que es dar amor no solo al seno familiar. Es por eso que la hermana de Teresita entró al monasterio de las carmelitas descalzas. Aunque esta decisión no fue fácil para ambas, la hermana de Teresita se fue para el monasterio. Podemos decir que Teresita quedó huérfana por segunda vez. Esto originó que ella cayera en una depresión muy fuerte que no solo estaba afectando su salud emocional sino también la física. Desde su soledad, motivación que le ayudó a acercarse mucho más a la vida espiritual, fe recibida por sus padres, ella empezó a hacerse su propio camino, a crecer y fortalecerse en la fe. De aquí la primera enseñanza, no basta del lugar en que venimos, nosotros tenemos que hacer nuestro propio camino.  

Teresita en un momento tuvo una visión. se le apareció la virgen con una expresión de un amor materno y con una sonrisa. La sonrisa de la virgen María marcó profundamente el corazón de Teresita para su vida. Esta sonrisa fue consuelo y fortaleza para Teresita de tal manera que la sacó de ese estado depresivo y ademas le ayudo a ponerse en el camino de servir a Dios con todo su ser.

Qué aprendemos de todo esto? Santa Teresita nos ensena que debemos tener la confianza que Dios se ha pronunciado a nuestro favor, tener la certeza que Dios está con nosotros,  nos ha sonreído, y su sonrisa es a través de las personas que nos aman y nos apoyan en las dificultades, en la palabra de Dios, en la eucaristía, en los santos, en la naturaleza. La sonrisa de Dios no le quita la dificultad al camino pero ciertamente lo hace mucho más accesible. Que el Señor nos ayude a sentir su presencia y sonrisa a pesar de las dificultades como a Job y como a Santa Teresita.

Señor como es de fácil seguirte cuando todo marcha bien, como cuesta seguirte mi Señor en medio de la dificultad.  Solo por Tu gracia podré ser fiel a ti y hacer las obras que quieres que haga por ti. Ayudame a crecer más en la fe en medio de las dificultades, a reconocer tu sonrisa en medio de los acontecimientos diarios y a tener la confianza en que Tu te has pronunciado a mi favor, porque tu sabes que es lo mejor para mi, porque detrás de una dificultad hay una gran lección de vida para mi, es solo mirar con los ojos de la fe. Por eso te entrego mis preocupaciones, mis angustias y mis tristezas porque detrás de todo eso vas a sacar algo bueno para mi, Amen, Amen, Amen.

Dios te bendiga,

Alabados sea Jesucristo!!!

Tarea: Como estamos en el amor, la confianza y gratitud hacia el Buen Dios?

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Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
     Sandra Yudy Zapata Escudero

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Santa Misa


Lectio Divina

De la Narración de la vida de santa Teresa del Niño Jesús, virgen, escrita por ella misma
(« Manuscrits autobiographiques», Lisieux 1957, 227-229)

EN El CORAZÓN DE LA IGLESIA, YO SERÉ El AMOR
Teniendo un deseo inmenso del martirio, acudí a las cartas de san Pablo, para tratar de hallar una respuesta. Mis ojos dieron casualmente con los capítulos doce y trece de la primera carta a los Corintios, y en el primero de ellos leí que no todos pueden ser al mismo tiempo apóstoles, profetas y doctores, que la Iglesia consta de diversos miembros y que el ojo no puede ser al mismo tiempo mano. Una respuesta bien clara, ciertamente, pero no suficiente para satisfacer mis deseos y darme la paz.

Continué leyendo sin desanimarme, y encontré esta consoladora exhortación: Aspirad a los dones más excelentes; yo quiero mostraros un camino todavía mucho mejor. El Apóstol, en efecto, hace notar cómo los mayores dones sin la caridad no son nada y cómo esta misma caridad es el mejor camino para llegar a Dios de un modo seguro. Por fin había hallado la tranquilidad.

Al contemplar el cuerpo místico de la Iglesia, no me había reconocido a mi misma en ninguno de los miembros que san Pablo enumera, sino que lo que yo deseaba era más bien verme en todos ellos. En la caridad descubrí el quicio de mi vocación. Entendí que la Iglesia tiene un cuerpo resultante de la unión de varios miembros, pero que en este cuerpo no falta el más necesario y noble de ellos: entendí que la Iglesia tiene un corazón y que este corazón está ardiendo en amor. Entendí que sólo el amor es el que impulsa a obrar a los miembros de la Iglesia y que, si faltase este amor, ni los apóstoles anunciarían ya el Evangelio, ni los mártires derramarían su sangre. Reconocí claramente y me convencí de que el amor encierra en sí todas las vocaciones, que el amor lo es todo, que abarca todos los tiempos y lugares, en una palabra, que el amor es eterno.

Entonces, llena de una alegría desbordante, exclamé:

«Oh Jesús, amor mío, por fin he encontrado mi vocación: mi vocación es el amor. Sí, he hallado mi propio lugar en la Iglesia, y este lugar es el que tú me has señalado, Dios mío. En el corazón de la Iglesia, que es mi madre, yo seré el amor; de este modo lo seré todo y mi deseo se verá colmado.»
RESPONSORIO    Cf. Sal 20,4; cf. Jb 31, 18; cf. Ef 3, 18; Sal 30, 20
R. Te adelantaste, Señor, a bendecirme con tu amor, el cual fue creciendo conmigo desde mi infancia; * y aun ahora no alcanzo a comprender la profundidad de tu amor.
V. ¡Qué bondad tan grande, Señor, reservas para tus fieles!
R. y aun ahora no alcanzo a comprender la profundidad de tu amor.

ORACIÓN.
OREMOS,
Dios y Padre nuestro, que abres las puertas de tu reino a los pequeños y a los humildes, haz que sigamos confiadamente el camino de sencillez que siguió santa Teresa del Niño Jesús, para que, por su intercesión, también nosotros lleguemos a descubrir aquella gloria que permanece escondida a los sabios y a los prudentes según el mundo. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos.
Amén

Déjate iluminar para que puedas iluminar a otros con la Luz de Dios.

  Déjate iluminar para que puedas iluminar a otros con la Luz de Dios. Primera lectura Comienzo de la segunda carta del apóstol san Pablo a ...