Dependiendo como tu miras a los demás, eso es lo que está alimentando tu corazón.
Oremos a la Luz de la Palabra de Dios
Hechos de los apóstoles 3, 1-10
" ....te doy lo que tengo: en nombre de Jesucristo Nazareno, levántate y anda"
Se conciente que es lo que tienes en tu corazón, porque dependiendo de eso es lo que tu vas a dar...
Sal 104, 1-2. 3-4. 6-7. 8-9 R/. Que se alegren los que buscan al Señor
La verdadera alegría está en el Señor, si Él es el centro de nuestra vida nada ni nadie nos podrá derribar.
Lucas 24, 13-35
" Lo reconocieron al partir el pan"
Mi amado Jesús, Tú eres el maestro de la mirada y quien está contigo aprende a mirar como tu. Tu mirada no es desde la crítica, de juicio, o de señalamientos, más bien tu mirada nos anima a encontrarnos a nosotros mismos para que redescubramos lo valioso que somos a pesar de nuestras incoherencias y equivocaciones. Quien se conoce a profundidad es capaz de practicar misericordia con su hermano.
En este peregrinar por la vida, nuestra mirada se va empañando por causa de decepciones y de preocupaciones, afectando nuestra fe y esperanza perdiendo la capacidad de mirar a quien camina a nuestro lado, en otras palabras el otro se vuelve paisaje perdiendo la capacidad de empatía. Hoy como quiero recuperar Tu mirada para poder ver mas de lo que puedo ver, para eso se requiere entrenamiento a la Luz de Tu Palabra y los sacramentos, medios que Tu utilizas para que mis ojos se abran al entendimiento y así desarrollar mi capacidad de escucha hacia ti y hacia mi prójimo.
Gracias porque Tu mirada me alcanza cuando estoy perdido, derrotado o distraído. Tu mirada tiene la fuerza y el poder de cambiar la manera de mirar y al abrirme los ojos me devuelves la dignidad de ser hij@s de Dios.
De la misma manera que tú lo haces conmigo me pides que lo haga con todos aquellos que pones en mi camino. Necesito ser más observador para poder recoger esas miradas que vagan por el mundo sin fe, sin esperanza y en desamor. Dame la gracia de llenarme de ti para que mi mirada les lleve cariño, respeto, ternura, solidaridad, y justicia. Que nos animemos unos a otros para que crezcamos en amor y fraternidad y darle la Gloria a Cristo resucitado, Amén.
Dios te bendiga,
¡Alabado sea Jesucristo por siempre sea alabado!
--
†
Que la
paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en
el mio...
Sandra Yudy Zapata Escudero
Encuentranos en : www.catolicosregina.com
Siguenos en facebook https://facebook.com/orandoyviviendo/
No hay comentarios:
Publicar un comentario