Descansar en el amor de Dios...
Oremos ante al Luz de la Palabra de Dios
Comienzo de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Corintios 1, 1-7" Dios nos conforta para que nosotros podamos confortar a los demás en todos sus sufrimientos "
Sal 33,2-3.4-5.6-7.8-9 R/. " Gustad y ved qué bueno es el Señor "
Mateo 5,1-12
En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió al monte, se sentó, y se acercaron sus discípulos; y, abriendo su boca les enseñaba diciendo:
«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Bienaventurados los mansos, porque ellos heredarán la tierra.
Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.
Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios.
Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Bienaventurados vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier moco por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo, que de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros».
Palabradel Señor
Mi amado Señor, tú eres un Padre de misericordia y de consuelo, de misericordia porque me haces experimentar tu gran misericordia conmigo al no tratarme conforme a mis pecados. Tu misericordia me alcanza al darme una y otra oportunidad porque tu no quieres que mi alma caiga al abismo de la perdición. De muchas maneras me manifiestas tu amor y tu presencia, cuando cambias el rumbo de mi vida, quitas y pones lo que me conviene, permites ciertas cosas que sucedan para que abra los ojos y me de cuenta no solo del error que estoy cometiendo sino el inmenso amor que me tienes. Mis pecados no te detienen para amarme, tu amor divino es tan grande que me ofreces tu perdón a pesar de la gravedad de mis equivocaciones. El poder de tu amor me llena de fuerza, esperanza y consuelo porque tu sabes que permanecer en ti se necesita la fuerza que viene de lo alto, ya que desde mis fuerzas no puedo. Así como tu me ofreces tu misericordia y tu perdón, Tu esperas que también yo lo haga con todos aquellos peregrinos que están en este caminar conmigo. Mientras somos consolados, podemos consolar porque Tu amor arropa a todos aquellos que se acercan a ti desde la sinceridad del corazón. Ayúdame Señor a vaciarme de mí mismo, del orgullo, de las apariencias, para abrirme a la gracia, al amor, y a la vida nueva que solo tu me puedes dar. Quiero ser pobre de espíritu que sólo confía en ti, así como un niñ@ se abandona en los brazos de sus padres.
Mi amado Señor, tú eres un Padre de misericordia y de consuelo, de misericordia porque me haces experimentar tu gran misericordia conmigo al no tratarme conforme a mis pecados. Tu misericordia me alcanza al darme una y otra oportunidad porque tu no quieres que mi alma caiga al abismo de la perdición. De muchas maneras me manifiestas tu amor y tu presencia, cuando cambias el rumbo de mi vida, quitas y pones lo que me conviene, permites ciertas cosas que sucedan para que abra los ojos y me de cuenta no solo del error que estoy cometiendo sino el inmenso amor que me tienes. Mis pecados no te detienen para amarme, tu amor divino es tan grande que me ofreces tu perdón a pesar de la gravedad de mis equivocaciones. El poder de tu amor me llena de fuerza, esperanza y consuelo porque tu sabes que permanecer en ti se necesita la fuerza que viene de lo alto, ya que desde mis fuerzas no puedo. Así como tu me ofreces tu misericordia y tu perdón, Tu esperas que también yo lo haga con todos aquellos peregrinos que están en este caminar conmigo. Mientras somos consolados, podemos consolar porque Tu amor arropa a todos aquellos que se acercan a ti desde la sinceridad del corazón. Ayúdame Señor a vaciarme de mí mismo, del orgullo, de las apariencias, para abrirme a la gracia, al amor, y a la vida nueva que solo tu me puedes dar. Quiero ser pobre de espíritu que sólo confía en ti, así como un niñ@ se abandona en los brazos de sus padres.
Mi alma ansía estar en un momento solo en tu presencia para experimentar la paz y serenidad en mi, mi corazón se llena de gratitud, se ensancha, quiere alcanzarte y poder permanecer siempre junto a ti. Donde el espacio, el tiempo, y las circunstancias no nos separen, porque así como los enamorados con solo una mirada expresan lo que sienten, de la misma manera quiero estar junto a ti para que me llenes del amor divino que todo lo puede y todo lo soporta, Amen.
Dios te bendiga,
¡Alabado sea Jesucristo por siempre sea alabado!
--
†
Que la
paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en
el mio...
Sandra Yudy Zapata Escudero
Encuentranos en : www.catolicosregina.com
Siguenos en facebook https://facebook.com/orandoyviviendo/
No hay comentarios:
Publicar un comentario