El sacerdocio no es sólo permanecer a Dios sino llevar almas hacia Dios

 

Isaías 52,13--53,12

" Mi siervo justificará a muchos, porque cargó con los crímenes de ellos"

Sal 39 " Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad "

Hebreos 10,12-23 " Teniendo un gran sacerdote al frente de la casa de Dios, acerquémonos con corazón sincero "

Lucas 22,14-20
Cuando llegó la hora, Jesús y sus apóstoles se sentaron a la mesa. Entonces les dijo: He tenido muchísimos deseos de comer esta Pascua con vosotros antes de padecer, pues os digo que no volveré a comerla hasta que tenga su pleno cumplimiento en el reino de Dios. Luego tomó la copa, dio gracias y dijo: Tomad esto y repartidlo entre ustedes. Os digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta que venga el reino de Dios. También tomó pan y, después de dar gracias, lo partió, se lo dio a ellos y dijo: Esto es mi cuerpo, entregado por vosotros; haced esto en memoria mía. De la misma manera tomó la copa después de la cena, y dijo: Esta copa es la nueva alianza sellada con mi sangre, que se derrama por vosotros.

Palabra del Señor

Mi amado Jesús, con tu vida nos enseñaste que para alcanzar la verdadera felicidad y plenitud está en la obediencia al Padre, y en el servicio desde el amor a nuestros hermanos. Esta es la mejor ofrenda de agradecimiento y gloria qué podemos hacer a nuestro Padre que está en los cielos. Quiero obedecer y servir desde el amor por convicción y no por obligación. Cada vez que me acerco a la Eucaristía mi alma se alimenta de ti. Cuando te recibo en el cuerpo y en la sangre entras en mi para permanecer en mi pequeño corazón para sanarlo, limpiarlo, transformarlo, y cuidarlo, porque es en el corazón donde nace y crece los sentimientos más sublimes pero también los sentimientos más malvados. Tu quieres reinar en mí y a través de mi para llevar paz y serenidad donde hace falta, llevar esperanza donde ya se ha perdido, llevar amor donde vive el desamor, llevar el perdón donde reina el rencor y el odio. 

Tú te convertiste en siervo de Dios para mostrarnos el camino que nos lleva a la salvación. Tu nos amaste hasta el extremo para enseñarnos que si es posible amar y perdonar a la manera de Dios, porque es Tu gracia la que hace el milagro en nosotros. Me acerco a ti con un corazón sincero y agradecido por lo que hasta ahora has hecho en mi vida, en mi familia y con todos aquellos quienes me rodean. 

Hoy renuevo mi misión sacerdotal bautismal que recibimos cuando nos bautizamos.  Dame la gracia Señor de ser Luz para los demás llevándolos al camino que nos lleva a la verdadera vida. Permite ser la senda de aquellos que aún viven distraídos en el mundo. Quiero ser ese fuego que calienta las almas que viven en el desierto, huesos secos y sin esperanzas. Tu sabes de qué estoy hecho, soy pequeñ@ y solo puedo ofrecerte mis debilidades. Quiero ser el reflejo de tu amor y testimonio de verdad. Porque el sacerdocio no es sólo permanecer a Dios sino llevar almas hacia Dios. Amen.

Dios te bendiga!

¡Alabado sea Jesucristo!  

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† Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
     Sandra Yudy Zapata Escudero

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