No hay frutos verdaderos sin esfuerzo, sin fatigas, sin sufrimientos.
Hechos de los apóstoles 18, 9-18
" No temas, sigue hablando y no te calles, pues yo estoy contigo, y nadie te pondrá la mano encima para hacerte daño... "
Sal 46, 2-3. 4-5. 6-7 R/. "Dios es el rey del mundo "
Lectura del santo evangelio según san Juan 16, 20-23a
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«En verdad, en verdad os digo: vosotros lloraréis y os lamentaréis, mientras el mundo estará alegre; vosotros estaréis tristes, pero vuestra tristeza se convertirá en alegría.
La mujer, cuando va a dar a luz, siente tristeza, porque ha llegado su hora; pero, en cuanto da a luz al niño, ni se acuerda del apuro, por la alegría de que al mundo le ha nacido un hombre.
También vosotros ahora sentís tristeza; pero volveré a veros, y se alegrará vuestro corazón, y nadie os quitará vuestra alegría. Ese día no me preguntaréis nada».
Palabra del Señor
No hay frutos verdaderos sin esfuerzo, sin fatigas, sin sufrimientos. Por eso Señor hoy quiero darte las gracias por las veces que me has levantado una y otra vez para que pueda seguir el camino, por las palabras de ánimo en los momentos de dificultad, por decirme una y otra vez “No temas…. Yo estoy contigo”, por hacerte presente en mi vida de tantas maneras para que no me sienta sol@. Soy testigo de que tengo un Dios de vivos y no solo eso sino que está presente y que camina junto a mi. Deseas que te crea para que podamos mirar a fondo el sentido de mi historia, porque nuestra vida nosotros la tejemos y tú la adornas con el aroma de tu amor, dejando la huella divina, extensión de tu presencia.
Seguirte Señor no es fácil, cuesta mucho porque cuando se ama hay compromiso, hay entrega, fidelidad y unidad. Cuando fallamos ya sea en el compromiso, en la entrega o en la fidelidad no significa que no te amemos, o que falta esfuerzo en hacerlo, sino que necesitamos la gracia de tu Santo Espíritu para que viviendo en este mundo terreno podamos también vivir con el alma hacia la eternidad. Cubreme Señor con tus besos para que no se me olvide cuanto me amas con un amor apasionado que alcanza a sanar mi alma, Amén.
Dios te bendiga,
¡Alabado sea Jesucristo por siempre sea alabado!
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† Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
Sandra Yudy Zapata Escudero
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