Cuando comulgamos recibimos a Cristo y el Cristo que comulgas es el mismo que te espera en el cielo.

Isaías 25,6-10a

Aquel día, el Señor de los ejércitos preparará para todos los pueblos, en este monte, un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera; manjares enjundiosos, vinos generosos. Y arrancará en este monte el velo que cubre a todos los pueblos, el paño que tapa a todas las naciones. Aniquilará la muerte para siempre. El Señor Dios enjugará las lágrimas de todos los rostros, y el oprobio de su pueblo lo alejará de todo el país. -Lo ha dicho el Señor-. Aquel día se dirá: "Aquí está nuestro Dios, de quien esperábamos que nos salvara; celebremos y gocemos con su salvación. La mano del Señor se posará sobre este monte."
Palabra de Dios

Hoy la primera lectura nos dice que Dios prepara a todos los pueblos y algunos se preguntaran, para que el señor nos preparara? Para un banquete!!! como dice la lectura un festín de manjares suculentos, un festín de vinos de solera; manjares enjundiosos, vinos generosos.

El Señor se está refiriendo a su hijo Jesucristo. Porque El es el único que aniquiló la muerte para siempre, El vencio el poder de las tinieblas. Si crees esto entonces tendrás la seguridad que El mismo nos enjugara las lagrimas, se llevara nuestras tristeza, el cansancio, el miedo,  nuestras preocupaciones y todo aquello que nos roba la alegría, la paz y la esperanza.   

La Eucaristía es la presencia de ese Dios que está vivo y que vive en medio de nosotros. Pidamosle al buen Dios que nos ayude a reconocer su presencia en la Sagrada Eucaristía y la necesidad de recibirlo en el cuerpo y la sangre de Cristo.  Porque de Él viene la salvación y es por eso que debemos estar alegres!!!

Salmo 22 "Habitaré en la casa del Señor por años sin término "

Mateo 15,29-37

En aquel tiempo, Jesús, bordeando el lago de Galilea, subió al monte y se sentó en él. Acudió a él mucha gente llevando tullidos, ciegos, lisiados, sordomudos y muchos otros; los echaban a sus pies, y él los curaba. La gente se admiraba al ver hablar a los mudos, sanos a los lisiados, andar a los tullidos y con vista a los ciegos, y dieron gloria al Dios de Israel.

Jesús llamó a sus discípulos y les dijo: "Me da lástima de la gente, porque llevan ya tres días conmigo y no tienen qué comer. Y no quiero despedirlos en ayunas, no sea que se desmayen en el camino." Los discípulos le preguntaron: "¿De dónde vamos a sacar en un despoblado panes suficientes para saciar a tanta gente?" Jesús les preguntó: "¿Cuántos panes tenéis?" Ellos contestaron: "Siete y unos pocos peces." Él mandó que la gente se sentara en el suelo. Tomó los siete panes y los peces, dijo la acción de gracias, los partió y los fue dando a los discípulos, y los discípulos a la gente. Comieron todos hasta saciarse y recogieron las sobras: siete cestas llenas.
Palabra de Dios
Te alabamos Señor

Ahora que estamos en esta época de Navidad, donde nos sobran las invitaciones con los amigos, compañeros de trabajo, con la comunidad y con la propia familia podemos decir que en ese banquete donde hay una gran comida también se espera que se disfrute en fraternidad. Por lo menos así lo ha entendido siempre el Oriente, donde invitar a comer es un modo elocuente de abrir el corazón.

Sin embargo la abundancia no importa. A veces cuando he compartido una cena donde el menú es sencillo y se disfruta más porque la abundancia no importa, el cache de la comida tampoco importa, la etiqueta no importa,  sino lo que ello implica una cena es tiempo de descanso y de confianza porque todos abrimos el corazón.

Mientras la primera lectura nos dice “ Y arrancará en este monte el velo que cubre a todos los pueblos... “ osea se va revelar y dar a conocer , ósea la verdad de Cristo. Cual es la Verdad de Cristo “ Que es el hijo de Dios, que vino a redimirnos, Él es el Mesías, el esperado!

He aquí la victoria que aguarda el profeta: vida que se hace fuerte por el alimento y vida que recibe defensa contra la muerte. Fuertes por dentro y protegidos por fuera: esa es la imagen de los redimidos. Dios nos crea, nos bendice, nos santifica y vive en ti y en mi.

Por eso cuando comulgamos recibimos a Cristo y el Cristo que comulgas es el mismo que te espera en el cielo.

Gracias Jesus por preparar el banquete para nosotros. Este banquete a nacido desde Tu compasión que sientes por cada uno de nosotros, Tu alimento es lo que mi alma necesita para no desfallecer en el camino. Dame de comer de Tu Pan que sacia el hambre y el vacio que tengo. Gracias por querer quedarte en medio de nosotros sosteniendo nuestro caminar, gracias por los sacerdotes que son Tu rostro en esta tierra, bendicelos, cuidalos y que sean santos. Gracias por las diferentes maneras que te acercas a mi, a traves de Tu Palabra, de los predicadores, de una emisora cristiana, de la eucaristía, porque solo tienes una razón para acercarte a mi, es poder saciar todo mi corazón y todo anhelo, Amen, Amen, Amen.

Dios te bendiga,

Alabado sea Jesucristo!!!

Tarea: Ser portadores de bendicion para los demás

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† Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
     Sandra Yudy Zapata Escudero
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