jueves, 5 de diciembre de 2019

La coherencia nos ayuda a alcanzar la firmeza interior y exterior.

Ser justo en la Biblia es hacer la voluntad de Dios osea ajustarse a su plan Divino. Hacer la Voluntad de Dios no es siempre estar en actividad. Hay que sacar valioso tiempo para escuchar, para callar, formarse, orar, aprender, padecer con los que sufren. De ahí la importancia de ser más contemplativos porque de lo contrario si nos enfocamos solo en hacer y no nos llenamos de Dios, entonces terminaremos diciendo “ Me siento solo”, “ Estoy cansado “, “ esto no es lo mio “. He conocido personas maravillosas que hacen hermosas obras benéficas pero al cabo del tiempo se cansan de hacer el bien, la razón es porque están esperando que le den las gracias y solo reciben ingratitudes, quieren recibir aplausos y solo reciben indiferencia, están esperando ser reconocidos y solo reciben críticas. El único que te inyecta al motor de tu corazón y te mantiene activo es Cristo. El es la roca que te ayuda a estar firme.

Porque es importante ser contemplativos?
La contemplación es acercarnos a Dios, es tener una mirada de Fe, fijada en Jesús. Como decía el Santo Cura de Ars  "Yo lo miro y él me mira". Su mirada nos purifica el corazón. La luz de la mirada de Jesús ilumina los ojos de nuestro corazón; nos enseña a ver todo a la luz de su verdad y de su compasión por todos los hombres. La contemplación dirige también su mirada a los misterios de la vida de Cristo. Aprende así el "conocimiento interno del Señor" para más amarlo y seguirlo (Cf San Ignacio de Loyola, Ejercicios Espirituales 104).
Si fuéramos más contemplativos alcanzariamos los sentimientos de Cristo, porque al Él entrar a la grieta de nuestra vida nos puede sanar las heridas más profundas que tiene nuestro corazón.  Aprender a silenciarnos o callarnos nos dispone a escuchar su voz que nos quiere decir tantas cosas, cosas bonitas como te amo, no estás solo, cuenta conmigo, todo va estar bien, confía en mí. Es dejarse formar por Su amor, es que El mismo te enseñe a orar al descubrir Sus sentimientos, Su amor, Su perdón, Su bondad. Es aprender a descubrir sus maravillas como también dejarnos moldear nuestro corazón para que cada vez se vaya ampliando y quepa más personas en El.

Cómo podemos lograr un firmeza interior y exterior?
Hay que ser coherentes, hay que ser íntegros en lo que creemos. Lo mismo que pienso y siento lo debo de hacer. Esto en nuestra fe Cristiana debe aplicarse en las virtudes teologales como es la Fe, la Esperanza y la Caridad. Esto es: si en fe creo en Cristo, en su perdón, que está presente en la eucaristía, y creo en sus sacramentos,  entonces mi fe debe demostrarse también en lo exterior, seré valiente al profesar mi fe, seré audaz, creativo y mi testimonio será la prueba de mi fe. Si vivo y tengo esperanza entonces debo ser persona que vive en esperanza y lleva esperanza donde va. Santo Tomás de Aquino dice “ La esperanza es resistir a la prueba “. No queda muy bien visto que tu profesas con los labios la esperanza y tu irradies desesperanza. Por eso hay que cuidar nuestras expresiones. Claro que hay momentos de desolación, pero mira muy bien a quien le cuentas tus problemas. Cuentaselos a aquellos quienes realmente te pueden ayudar.  La tercera virtud teologal es el amor o la caridad, ha veces es fácil demostrar nuestros afectos a los de la calle que a los que están cerca de ti. Pregúntate… Qué detalles tienes con los que viven contigo? .

En conclusión la coherencia interior y exterior solo se logra cuando somos coherentes. En nuestra Fe cristiana se deben aplicar en las virtudes teologales como es la fe, la esperanza y la caridad.

Mi amado Jesús, ayúdame a ser más contemplativo osea tener una mirada de Fe  y fijada en Ti. Tu mirada no me juzga, sino que purifica las intenciones de mi corazón, Tu mirada me ilumina para ver la realidad de quien soy. Tu mirada me ayuda a descubrir que también hay otros que esperan de mí. Dame la gracia de descubrir los misterios de Tu vida, conocerte más para amarte más, cuando experimento la profundidad de tu amor puedo llegar a la obediencia por la gracia, y cuando alcance la obediencia que Tu me pides podre verdaderamente seguirte. Que en este tiempo de adviento crezca en mí la confianza en Ti, Tú que eres la roca firme en que he puesto toda mi Fe, mi Esperanza y mi Amor. Amen.

Dios te bendiga,

Alabado sea Jesucristo por siempre sea Alabado!!!
--
Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
     Sandra Yudy Zapata Escudero

Encuentranos en : www.catolicosregina.com
Siguenos en facebook  https://facebook.com/orandoyviviendo/ 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjate iluminar para que puedas iluminar a otros con la Luz de Dios.

  Déjate iluminar para que puedas iluminar a otros con la Luz de Dios. Primera lectura Comienzo de la segunda carta del apóstol san Pablo a ...