miércoles, 1 de noviembre de 2017

Todo el que tiene esperanza en él, se purifica a sí mismo, como él es puro.


Apocalipsis 7,2-4.9-14

Yo, Juan, vi a otro ángel que subía del oriente llevando el sello del Dios vivo. Gritó con voz potente a los cuatro ángeles encargados de dañar a la tierra y al mar, diciéndoles: "No dañéis a la tierra ni al mar ni a los árboles hasta que marquemos en la frente a los siervos de nuestro Dios." Oí también el número de los marcados, ciento cuarenta y cuatro mil, de todas las tribus de Israel.

Después esto apareció en la visión una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de toda nación, raza, pueblo y lengua, de pie delante del trono y del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. Y gritaban con voz potente: "¡La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero!" Y todos los ángeles que estaban alrededor del trono y de los ancianos y de los cuatro vivientes cayeron rostro a tierra ante el trono, y rindieron homenaje a Dios, diciendo: "Amén. La alabanza y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y el honor y el poder y la fuerza son de nuestro Dios, por los siglos de los siglos. Amén."

Y uno de los ancianos me dijo: "Ésos que están vestidos con vestiduras blancas, ¿quiénes son y de dónde han venido?" Yo le respondí: "Señor mío, tú lo sabrás." Él me respondió: "Éstos son los que vienen de la gran tribulación: han lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero."
Palabra de Dios


Hoy la primera lectura nos habla que una muchedumbre que nadie podía contar. Estamos acostumbrados a que el mal haga escándalo y sea la gran noticia en los noticieros y es porque nos hemos vuelto muy amarillistas. Pero hoy en esta lectura hay un giro interesante y vemos que es el bien el que llega a notarse. Así como el mal existe, hoy nos recuerda la lectura que también el bien existe; está entre nosotros, aunque, por ahora, permanece de modo casi invisible.

En la muchedumbre que hay? gente de toda raza, lengua, pueblo y nación. Aquí estamos incluidos todos y es que la salvación no es para un grupo cerrado que deja excluido al resto.

Esta muchedumbre de la tierra se une con la del cielo, lo que quiere decir que quizás muchas veces estábamos pensando que luchábamos solos, que sufríamos solos, que no teníamos más compañía que nuestras propias ideas y recursos. De repente, el velo se corre y vemos que estamos y que siempre estuvimos acompañados. Millares de ángeles se gozan en el mismo Dios nuestro, y nuestro gozo es su mismo gozo.

Este peregrinar es de todos, algunos irán más adelante que nosotros, pero Dios que es misericordioso se hace el encontradizo en nuestra vida, en nuestro camino, en la situación que estás viviendo con una única razón para que no te sientas solo en esta vida y que cuando pienses que ya no das más, cuando parece que ya no tienes más fuerzas El mismo te dice “  descansa en Mí porque en mis regazo encontrarás consuelo, paz y amor “.

Salmo 23 " Éste es el grupo que viene a tu presencia, Señor"

1 Juan 3,1-3

Queridos hermanos: Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no le conoció a él. Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es. Todo el que tiene esperanza en él, se purifica a sí mismo, como él es puro.
Palabra de Dios


Mateo 5,1-12a

En aquel tiempo, al ver Jesús el gentío, subió a la montaña, se sentó, y se acercaron sus discípulos; y él se puso a hablar, enseñándoles: "Dichosos los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos los que lloran, porque ellos serán consolados. Dichosos los sufridos, porque ellos heredarán la tierra. Dichosos los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados. Dichosos los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Dichosos los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Dichosos los que trabajan por la paz, porque ellos se llamarán los Hijos de Dios. Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Dichosos vosotros cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Estad alegres y contentos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo."
Palabra de Dios
Te alabamos Señor


Hoy celebramos el día de todos los Santos y es así como se levanta un canto de alabanza con el salmo “ Éste es el grupo que viene a tu presencia, Señor “.

Que es la santidad? La santidad es presencia de Dios, y por eso es primero búsqueda de Dios. Podemos decir que un santo es aquel que ha sido consecuente y perseverante en su búsqueda de Dios. Todo cristiano católico es llamado a ser santo. El santo no es el que nunca a pecado. Pecar es dejar de buscar; el gran pecado es "estacionarse", sentarse al borde del camino y dejar de buscar.

Tanto Pedro como Judas traicionaron a Jesús, sin embargo, Pedro no se estacionó, no se quedó en su pecado; Judas, hasta donde sabemos, sí. El quedarse estacionado en borde de camino, desesperado terminó colgado de un árbol. Por eso Judas perdió la gracia del apostolado; Pedro, no.

También nos preguntaremos, si solo hay un camino. Jesús es el único camino claro que sí, y es por eso que Jesús nos muestra que las obras de misericordia osea las bienaventuranzas son las que nos lleva alcanzar la santidad.

Cual es la brújula de santidad para los cristianos?
Las bienaventuranzas. Porque? porque las bienaventuranzas son realidades que se viven en esta tierra y que preparan la bienaventuranza más allá de esta tierra. No podemos separar la existencia terrena de la vida más allá de este mundo y más cuando creemos que tenemos una vida después de la muerte.

Hay una iglesia peregrina que somos nosotros. En el banquete eucarístico es el mismo Cristo que se parte y se comparte, se dona a cada uno de nosotros. Es el pan bajado del cielo que necesitamos para seguir luchando en este peregrinar. Además el mismo Cristo que recibimos en la eucaristía es el mismo que nos recibirá en la gloria.  Una misa bien vivida es una escuela de alegría, de alabanza y sobre todo de gratitud.

Hay unas almas del purgatorio, aquellas que aún no han podido ver el rostro de Cristo. Es por eso que hay que orar por ellas , esa es una obra de caridad que hacemos cuando rezamos por ellas para que alcancen un dia a ver el rostro de Cristo en la Gloria.

La Iglesia Triunfante es donde están los ángeles, y los santos. Ellos gozan de la Gloria y la Presencia de Dios. Los Santos son nuestras guías para nuestro peregrinar porque ellos fueron personas como nosotros pecadores pero  dejaron que el Evangelio se hiciera vida en ellos y ellos nos dan esperanza que su esfuerzo y por gracia de Dios alcanzaron a dar fruto. Además Dios nos los da a los santos para que vivamos esta vida con esperanza y para que contemos con la eficacia de su intersección.

Gracias Señor por habernos dado a los Santos de nuestra iglesia Catolica. Ellos son verdaderos faros en esta vida porque siendo seres humanos como nosotros, imperfectos y pecadores alcanzaron la santidad porque dejaron que Tu evangelio se hiciera en su vida. Hoy me invitas a ser santo así como Tu hijo Jesucristo que es el Santo de Dios y en su vida y su palabra está la santidad que Dios ha pensado para nuestras vidas. Dame la gracia Senor de no perder la esperanza por causa del pecado y la voluntad de seguirte buscando a través de las prácticas de las obras de misericordia porque ellas me ayudaran alcanzar la santidad porque las bienaventuranzas son realidades que se viven en esta tierra y que preparan la bienaventuranza más allá de esta tierra. Amen, Amen, Amen.

Dios te bendiga

Alabados ea Jesucristo!!!


Tarea : Ser alegres y contagiar a los demás con esa alegría


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Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
     Sandra Yudy Zapata Escudero

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