jueves, 2 de agosto de 2018

Permanecer en las manos de Dios.


Jeremías 18, 1-6
Palabra del Señor que recibió Jeremías: Levántate y baja al taller del alfarero, y allí te comunicaré mi palabra."
Bajé al taller del alfarero, que estaba trabajando en el torno. A veces, le salía mal una vasija de barro que estaba haciendo, y volvía a hacer otra vasija, según le parecía al alfarero.
Entonces me vino la palabra del Señor: ¿Y no podré yo trataros a vosotros, casa de Israel, como este alfarero? -oráculo del Señor-.
Mirad: como está el barro en manos del alfarero, así estáis vosotros en mi mano, casa de Israel.
Palabra de Dios


Hoy la primera lectura es preciosa porque el Señor quien desde su amor hace posible el milagro en una vasija de barro. Su gracia poderosa hace posible la vida divina en la existencia humana.

Cada uno de nosotros llevamos un tesoro precioso y valioso en nuestro ser, El mismo Dios, somos a imagen y semejanza del creador. Este cuerpo carnal es el barro y cada vez que dejamos que el alfarero, osea Dios trabaje en nuestro barro, en nuestro ser, por su gracia se hace posible que la vida divina se haga vida en nosotros.

Por eso que es importante alimentar nuestra vida espiritual y recordando los ejercicios espirituales de San Ignacio de Loyola donde nos recomienda estos pasos para hacer un discernimiento espiritual. Primero hacer un alto en el camino para agradecer a Dios. Reconocer  todas las bendiciones que hemos recibido de parte de Él nos ayudará a ser más conscientes que nada nos lo merecemos sino que Dios desde su amor y misericordia nos bendice. Entre más agradecido más bendecido. Hacer un alto en el camino también es observar nuestra vida a cara de Dios. Reconocer nuestros faltas y ofensas a ese Dios que nos ama. El pecado debe causar dolor en nuestro corazón. Pero cómo reconocemos el pecado o las faltas que cometemos a Dios y a nuestros hermanos?

La iglesia nos invita a que cada dia hay que hacer un examen de conciencia de lo que hicimos bien durante el día y que obras de amor nos faltó por hacer. Mientras seamos más constantes, conscientes y honestos con el examen de conciencia esto se volvera un hábito y será un buen medidor de cómo estamos llevando nuestra vida cristiana conforme al evangelio. Además esto nos ayudará a reparar, lo que significa hacer compromisos concretos. Por último continuar, no podemos ser sólo hombres y mujeres de oración solamente, como dice San Benito “ Orando y trabajando “. Hay que tener un balance. Hay que sacar tiempo para orar porque ese es el alimento que necesitamos para fortalecernos, como Jesús lo hacía. Hay que trabajar porque como dice en proverbios “ el que no trabaje que no coma”. Tener una vida en Cristo es tu con Dios y con el hermano. 

Jeremias hoy nos invita a que permitamos que el poder de Dios obre en nosotros, es ponernos en sus manos. Si lo hacemos ten la seguridad que vas alcanzar la felicidad que tanto anhelas y deseas, porque nos realizaremos a plenitud. Este proceso implica también sacrificios y renuncias para ser remodelados en nuevas creaturas. Tomarás el riesgo?

Salmo 145 " Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob"

Mateo 13, 47-53

En aquel tiempo, dijo Jesús a la gente: "El reino de los cielos se parece también a la red que echan en el mar y recoge toda clase de peces: cuando está llena, la arrastran a la orilla, se sientan, y reúnen los buenos en cestos y los malos los tiran.
Lo mismo sucederá al final del tiempo: saldrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos y los echarán al horno encendido. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.
¿Entendéis bien todo esto?" Ellos le contestaron: "Sí."
Él les dijo: "Ya veis, un escriba que entiende del reino de los cielos es como un padre de familia que va sacando del arca lo bueno y lo antiguo."
Cuando Jesús acabó estas parábolas, partió de allí.
Palabra de Dios.
Te alabamos Señor


Hoy Jesús nos habla de los misterios del Reino de Dios. Aunque Jesús les explica, El quiere estar seguro que ellos han entendido bien, es por eso que les dice “ ¿Entendéis bien todo esto? “ . Hoy Jesús también nos pregunta… Ustedes realmente han entendido? porque si lo hubiéramos entendido muy bien entonces no viviríamos de la manera que vivimos, cierto?

Así como a la gente del evangelio nos puede suceder a nosotros también, creemos entender el mensaje de Jesús.

Retomando la primera lectura miremos lo que Dios le dice  a Jeremías “ Levántate y baja al taller del alfarero, y allí te comunicaré mi palabra.". Esto es debo de descubrir que no entiendo, darme cuenta que no me estoy dando cuenta de todo es el principio de la sabiduría. Recuerda que una persona sabia es quien desde su corazón humilde reconoce que no todo lo sabe, un sabio escucha más y habla poco. Algunos puede caer en el error de entender todo, que ya han dado todo de sí,  entonces es por eso que desprecian la buena nueva, los buenos consejos.

Algo que me llama la atención es que si nosotros estando en las manos del alfarero nos podemos dañar como será si nos apartamos más de Él, si nos salimos de sus manos, esa vasija pierde el valor, no será importante para nadie. El valor y el futuro de ese barro está solamente en una cosa permanecer en las manos del alfarero. Si permanecemos en las manos de Dios todavía se puede recuperar esa vasija.

A veces vemos nuestra vida que es un fracaso , de aciertos y desaciertos, pareciera que nuestra vida se hundiera, nos hacemos preguntas como por ejemplo porque Dios permite que me suceda estas cosas, estas tragedias, estos pecados. Pero a pesar de todo esto, hay que permanecer en las manos del alfarero. Si permanecemos en las manos de Dios aunque pareciera ese barro inútil se convertirá un día en una preciosa vasija no solo hermosa para los ojos sino que también  será útil para la casa de Dios que es la iglesia.

Gracias Señor por tenerme en tus manos, por cuidarme y desear lo mejor para mi. Dame la gracia de ser dócil para hacer tu voluntad, lo que significa que debo permitirte moldearme a tu manera, que debo de hacer renuncias y sacrificios. Quiero tomar el riesgo porque lo que más deseo y anhelo es alcanzar la felicidad. Permaneciendo en Ti me realizare en plenitud. Ayudame a parar y no vivir la vida distraído, a observar la vida a cara ante ti, para así reconocer los errores y faltas, tener la voluntad de reparar como también estar en movimiento hacia ti y hacia mis hermanos, continuando el camino que me lleva a la salvación eterna, Amen, Amen, Amen.

Dios te bendiga,

Alabado sea Jesucristo!!!

Tarea : Actúa con inteligencia y sabiduria.



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Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
     Sandra Yudy Zapata Escudero

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