jueves, 12 de octubre de 2023

Un corazon humilde es capaz de tener paciencia y ser perseverante

 



Malaquías 3,13-20a
" Pero a los que honran mi nombre los iluminará un sol de justicia que lleva la salud en las alas"

Salmo 1 " Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor.

Lucas 11,5-13
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: "Si alguno de vosotros tiene un amigo, y viene durante la medianoche para decirle: "Amigo, préstame tres panes, pues uno de mis amigos ha venido de viaje y no tengo nada que ofrecerle." Y, desde dentro, el otro le responde: "No me molestes; la puerta está cerrada; mis niños y yo estamos acostados; no puedo levantarme para dártelos." Si el otro insiste llamando, yo os digo que, si no se levanta y se los da por ser amigo suyo, al menos por la importunidad se levantará y le dará cuanto necesite.

Pues así os digo a vosotros: Pedid y se os dará, buscad y hallaréis, llamad y se os abrirá; porque quien pide recibe, quien busca halla, y al que llama se le abre. ¿Qué padre entre vosotros, cuando el hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿O si le pide un pez, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? Si vosotros, pues, que sois malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo piden?"
Palabra del Señor

Hoy Señor me recuerdas que tu eres un Dios justo y por eso no debo de dudar de la manera como actúas antes las situaciones de cada dia. Reconozco las veces que he actuado de manera impaciente dudando de tu presencia en medio del caos y de la injusticia al ver cómo los malvados dañan a otros y no les pasa nada.  A través de Tu Palabra me hablas al corazón y me dices que tenga paciencia, que espere con esperanza, porque habrá una diferencia entre los buenos y malos, entre los que te obedecen y los que no lo obedecen. Hoy me pides que NO me rinda frente al encanto del mal, que No me rinda en obedecerte, que NO me rinda en la oración, que persevere hasta el final porque Tú me mostraras que si valió la pena. 

Dame la gracia Señor de fortalecer la paciencia y permanecer en la oración. La paciencia es la fuente que me ayuda a no desfallecer y la perseverancia es el reconocimiento de que nuestra voluntad necesita prepararse para acoger la voluntad divina que es Buena, Agradable y Perfecta. Toca mi corazón Señor  para que alcance la humildad que necesito, porque solo el humilde persevera y reconoce que todo lo que viene de ti nos conviene, y llega en la mejor hora. Amen.

Dios te bendiga,

¡Alabado sea Jesucristo por siempre sea alabado!

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