martes, 3 de noviembre de 2015

Cristo nos ofrece su amor incondicional, pero a veces los hombres no aceptan su amor.....


Del santo Evangelio según san Lucas 14, 15-24
Habiendo oído esto, uno de los comensales le dijo: «¡Dichoso el que pueda comer en el Reino de Dios!» Él le respondió: «Un hombre dio una gran cena y convidó a muchos; a la hora de la cena envió a su siervo a decir a los invitados: "Venid, que ya está todo preparado." Pero todos a una empezaron a excusarse. El primero le dijo: "He comprado un campo y tengo que ir a verlo; te ruego me dispenses." Y otro dijo: "He comprado cinco yuntas de bueyes y voy a probarlas; te ruego me dispenses." Otro dijo: "Me he casado, y por eso no puedo ir." «Regresó el siervo y se lo contó a su señor. Entonces, airado el dueño de la casa, dijo a su siervo: "Sal en seguida a las plazas y calles de la ciudad, y haz entrar aquí a los pobres y lisiados, y ciegos y cojos." Dijo el siervo: "Señor, se ha hecho lo que mandaste, y todavía hay sitio." Dijo el señor al siervo: "Sal a los caminos y cercas, y obliga a entrar hasta que se llene mi casa." Porque os digo que ninguno de aquellos invitados probará mi cena».
Palabra de Dios
Gloria a ti Senor Jesus

Hoy el evangelio nos quiere ensenar una vez mas que todos estamos invitados a participar en la comunidad de Cristo. Que nos puede suceder muchas veces? Algunos sacan excusas para no ir a la fiesta, otros se sienten excluidos de pertenecer en la comunidad porque tuvieron una amarga experiencia con alguien que los rechazo, otros piensan que no son dignos de pertenecer a la comunidad por sus continuas equivocaciones. Hoy nos vamos a centrar especificamente en aquellos que siempre sacan excusas para no ir a la fiesta. Una cosa es que cuando los invitados dicen que si iran pero a la hora de la verdad no van, otros es que aunque los invitan de una vez sacan las disculpas del porque no pueden ir a la fiesta. Todos los hijos de Dios estamos invitados a esa fiesta, estamos en la lista de Dios, pero esa lista no es porque ocupemos un lugar importante ante la sociedad, o por todos los titulos que tenemos, o por todo el dinero, fama o poder que gocemos. Somos invitados porque Dios nos ama y porque no quiere que ninguno de nosotros nos quedemos por fuera de la fiesta. Aunque estemos en la lista de Dios, eso no es suficiente. Pertenecer a una comunidad o a la iglesia de Cristo es una gracia. Dios quieure que participemos en ella porque El quiere que participemos de todo lo que tenemos, d ela svirtudes, de las cualidades que el mismo Senor nos ha regalado, es server del uno para el otro. Ademas entar a la iglesia significa estar disponible para aquello que el Senor Jesus nos pide. Nosotros somos su pueblo peregrino que camina hacia la eternidad. Nadie de nosotros es el protagonista de la iglesia, solo hay uno y ese es Dios.  Todos vamos detras de El y el que no va detras de El, es uno quien saca excusas y no asiste a la fiesta. Pero realmente cual es el banquete, cual es la fiesta? la Eucaristia. Por medio de la eucaristia nosotros le manifestamos la gratitud a nuestro padre Celestial por todo lo que nos ha dado, tanto las bendiciones materiales como espirituales como tambien a que nos ayude a ser santos y hacer su voluntad. Tambien es pedirle que nos regale un poco mas de sabiduria para poder resolver de manera mas correcta los problemas y dificultades que se nos presentan a diario. En la eucaristia encontramos la Palabra de Dios, hacemos el acto de fe, reconocemos nuestros pecados, Jesus es quien se entrega nuevamente para darse a nosotros y somos nosotros quien lo tomamos para que nos alimente este cuerpo enfermo, pero ademas en la iglesia crecemos en Fe y en esperanza, podemos practicar actos de misericordia y servicio, como tambien le deseamos la paz al que esta a nuestro lado, por ultimo en la eucaristia el Padre nos bendice y nos invita a llevar la Buena noticia a los demas, concretamente con el testimonio de vida.
Senor hoy vengo a ti sediento de ti, quien soy yo para que el Senor me busque y me invite a participar en la oracion y en la eucaristia? Quiero estar dispuesto en todo momento a tu llamado. Reconozco que muchas veces me alejo de ti pero tu por el contrario siempre estas ahi para auxiliarme, para que me sienta acompanado y amado por ti. Tu solo lo que buscas es mi satificacion. Por eso gracias porque siempre caminas conmigo, por tu amor y porque siempre bendices. Contigo tengo todo y sin ti no soy nada, que importa que pierda todo, pero que nunca me faltes tu mi Senor, Amen.

Tarea: Vivir con lealtad y fidelidad nuestra vida

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Déjate iluminar para que puedas iluminar a otros con la Luz de Dios.

  Déjate iluminar para que puedas iluminar a otros con la Luz de Dios. Primera lectura Comienzo de la segunda carta del apóstol san Pablo a ...