Lectura del Libro de los Hechos de los Apóstoles 4, 1-12 " Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: “Jefes del pueblo y ancianos de Israel: hoy ha quedado sano un hombre enfermo, y nos preguntan en nombre de quién se ha realizado esta curación; pues sepan ustedes y todo el pueblo de Israel que este hombre aparece sano ante ustedes en virtud del nombre de Jesús de Nazaret, a quien ustedes crucificaron, y a quien Dios ha resucitado de entre los muertos "
Hoy la primera lectura vemos como Pedro y Juan a pesar de estar encarcelados por causa de ensenar y anunciar al pueblo la Palabra de Dios, ellos no se atemorizaron porque su confianza estaba puesta en Jesus. Pedro frente a la pregunta de los sumos sacerdotes, los ancianos y escribas respondio con mucha sabiduria porque la misma lectura nos dice que Pedro estaba lleno del Espriitu Santo. Hoy volvemos a ver un Pedro que no busca protagonismo, El le da la gloria, el honor y la alabanza al Nazareno al responder " Con qué poder o en nombre de quién ustedes han hecho esto?” Jefes del pueblo y ancianos de Israel: hoy ha quedado sano un hombre enfermo, y nos preguntan en nombre de quién se ha realizado esta curación; pues sepan ustedes y todo el pueblo de Israel que este hombre aparece sano ante ustedes en virtud del nombre de Jesús de Nazaret, a quien ustedes crucificaron, y a quien Dios ha resucitado de entre los muertos. Recordemos que ayer deciamos que el verdadero discipulo no busca seguidores para si, no busca protagonismos, si pesca hombres es para que sigan a Jesus, a El es a quien deben de seguir. Por eso el termina la lectura diciendo Él es la piedra rechazada por ustedes, los constructores, que se ha convertido en piedra angular. Ningún otro puede salvar; bajo el cielo no se nos ha dado otro nombre que pueda salvarnos. Pedro nos exhorta y nos vuelve a confirmar que solo Jesus es quien nos salva!!!
Salmo 117 " La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular "
Lectura del Evangelio según san Juan 21, 1-14
En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a sus discípulos junto al lago de Tiberíades. Estaban juntos Simón Pedro, Tomás el Gemelo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. En esto dijo Simón Pedro: “Voy a pescar”.
Los otros dijeron: “Vamos contigo”. Salieron y juntos subieron a la barca; pero aquella noche no lograron pescar nada. Al clarear el día, se presentó Jesús en la orilla del lago, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. El les dijo: “Echen la red al lado derecho de la barca y encontrarán peces”. Ellos la echaron, y la red se llenó de tal cantidad de peces que no podían moverla. Entonces el discípulo a quien Jesús tanto amaba le dijo a Pedro: “ ¡Es el Señor!” Al oír Simón Pedro que era el Señor, se puso la túnica, pues estaba sin ella, y se lanzó al agua. Los otros discípulos llegaron hasta la orilla en la barca, arrastrando la red llena de peces, pues no era mucha la distancia que los separaba de tierra; tan sólo unos cien metros.
Al saltar a tierra, vieron unas brasas, con peces colocados sobre ellas, y pan. Jesús les dijo: “Traigan ahora algunos de los peces que acaban de pescar”. Simón Pedro subió a la barca y bajó a tierra la red llena de peces; en total eran ciento cincuenta y tres peces grandes. Y, a pesar de ser tantos, la red no se rompió. Jesús les dijo: “Vengan a comer algo”.
Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: “¿quién eres?”, porque sabían muy bien que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan en sus manos y lo repartió; y lo mismo hizo con los peces. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos, después de haber resucitado de entre los muertos.
Hoy la primera lectura vemos como Pedro y Juan a pesar de estar encarcelados por causa de ensenar y anunciar al pueblo la Palabra de Dios, ellos no se atemorizaron porque su confianza estaba puesta en Jesus. Pedro frente a la pregunta de los sumos sacerdotes, los ancianos y escribas respondio con mucha sabiduria porque la misma lectura nos dice que Pedro estaba lleno del Espriitu Santo. Hoy volvemos a ver un Pedro que no busca protagonismo, El le da la gloria, el honor y la alabanza al Nazareno al responder " Con qué poder o en nombre de quién ustedes han hecho esto?” Jefes del pueblo y ancianos de Israel: hoy ha quedado sano un hombre enfermo, y nos preguntan en nombre de quién se ha realizado esta curación; pues sepan ustedes y todo el pueblo de Israel que este hombre aparece sano ante ustedes en virtud del nombre de Jesús de Nazaret, a quien ustedes crucificaron, y a quien Dios ha resucitado de entre los muertos. Recordemos que ayer deciamos que el verdadero discipulo no busca seguidores para si, no busca protagonismos, si pesca hombres es para que sigan a Jesus, a El es a quien deben de seguir. Por eso el termina la lectura diciendo Él es la piedra rechazada por ustedes, los constructores, que se ha convertido en piedra angular. Ningún otro puede salvar; bajo el cielo no se nos ha dado otro nombre que pueda salvarnos. Pedro nos exhorta y nos vuelve a confirmar que solo Jesus es quien nos salva!!!
Salmo 117 " La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular "
Lectura del Evangelio según san Juan 21, 1-14
En aquel tiempo, Jesús se apareció otra vez a sus discípulos junto al lago de Tiberíades. Estaban juntos Simón Pedro, Tomás el Gemelo, Natanael el de Caná de Galilea, los hijos de Zebedeo y otros dos discípulos. En esto dijo Simón Pedro: “Voy a pescar”.
Los otros dijeron: “Vamos contigo”. Salieron y juntos subieron a la barca; pero aquella noche no lograron pescar nada. Al clarear el día, se presentó Jesús en la orilla del lago, pero los discípulos no lo reconocieron. Jesús les dijo: “Muchachos, ¿han pescado algo?” Ellos contestaron: “No”. El les dijo: “Echen la red al lado derecho de la barca y encontrarán peces”. Ellos la echaron, y la red se llenó de tal cantidad de peces que no podían moverla. Entonces el discípulo a quien Jesús tanto amaba le dijo a Pedro: “ ¡Es el Señor!” Al oír Simón Pedro que era el Señor, se puso la túnica, pues estaba sin ella, y se lanzó al agua. Los otros discípulos llegaron hasta la orilla en la barca, arrastrando la red llena de peces, pues no era mucha la distancia que los separaba de tierra; tan sólo unos cien metros.
Al saltar a tierra, vieron unas brasas, con peces colocados sobre ellas, y pan. Jesús les dijo: “Traigan ahora algunos de los peces que acaban de pescar”. Simón Pedro subió a la barca y bajó a tierra la red llena de peces; en total eran ciento cincuenta y tres peces grandes. Y, a pesar de ser tantos, la red no se rompió. Jesús les dijo: “Vengan a comer algo”.
Y ninguno de los discípulos se atrevía a preguntarle: “¿quién eres?”, porque sabían muy bien que era el Señor. Jesús se acercó, tomó el pan en sus manos y lo repartió; y lo mismo hizo con los peces. Esta fue la tercera vez que Jesús se apareció a sus discípulos, después de haber resucitado de entre los muertos.
Palabra del Señor.
Gloria a ti Senor Jesus
Gloria a ti Senor Jesus
Esta es la tercera vez que Jesus aparece en la vida de los discipulos, de sus amigos. Vemos varios mensajes en este evangelio. Primero los discipulos salieron juntos a pescar, aunque habia pasado por el sufrimiento y la tristeza de la muerte de su maestro, ellos seguian juntos como familia, el dolor los mantenia unidos. Segundo, los discipulos no lograron pescar nada y aunque Jesus estaba en la orilla y no lo reconocieron, Jesus les dice " Muchachos, ¿han pescado algo? ”, ellos respondieron " no ". Porque Jesus les pregunta eso? seria que El no sabia que sus discipulos no habian pescado nada?, Claro que Jesus sabia la verdad, pero a renglon seguido Jesus les dice Echen la red al lado derecho de la barca y encontrarán peces, tan pronto ellos hecharon las redes al mar la red se lleno de cantidad de peces. Pero notese que solo el discipulo amado, algunos afirman que era Juan, fue el unico que reconocio a Jesus. Este es el tercer mensaje, reconocer. El motivo fue porque quizas en el primer encuentro con Jesus el discipulo amado no lo reconocio porque estaba agotado de todo un dia de pesca y no habian podido pescar nada, pero en la segunda intervencion de Jesus Juan lo reconocio porque me imagino que el penso " quien seria capaz de saber donde estan la gran cantidad de peces?. Pero es Hermosa la actitud de Juan, el no se queda callado de tal maravilla, Juan reconocido no solo con sus ojos y sino ademas con el Corazon a Jesus no se queda callado sino que le dice a Pedro Es el Señor, este es el cuatro mensaje le dice a otro lo que sus ojos han visto. Pedro sin dudar va hacia el encuentro con Jesus. Pedro dejo lo que estaba haciendo, osea no tenia ninguna atadura ni siquiera la cantidad de peces por lo que habia trabajo tanto. Ademas Jesus les dice " Vengan a comer algo ", osea Jesus reconoce que ellos estan fatigados del dia de sol, ellos habian perdido las esperanzas y ahora tambien estaban agotados por haber cogido tantos peces. Jesus no solo les da la bendicion de la abundante pesca sino que ademas los invita para que coman con El.
Jesus vive y esta presente en nuestra cotidianidad y esta en nosotros en buscar su presencia en cada momento porque El esta presente en todo lo que hacemos. Si lo hacemos asi, El bendecirá cada una de las obras de nuestro trabajo, dandonos cada dia una pesca milagrosa. Pidamos a Jesus que en esta Pascua nos conceda el don de la oracion, y una presencia muy cercana de su gracia en nuestra vida.
Gracias Senor por este mensaje de amor que traes a mi vida. Hoy me recuerdas que solo Tu nos puedes y quieres salvar. Senor aunmenta mi fe para reconocerte en la eucaristia, en los rostros concretos de aquellas personas que Tu mismo me pones en mi camino. dame la gracia de dar testimonio con mi vida como tambien con las palabras que el Santo Espiritu de Dios pone en mi Corazon y en mis labios, ayudame a ser coherente, a orar e interceder por otros y que no me quede callado frente a esta maravilla de haberme encontrado con el resucitado, y decir firmemente " Jesus es el Señor, Amen.
Gracias Senor por este mensaje de amor que traes a mi vida. Hoy me recuerdas que solo Tu nos puedes y quieres salvar. Senor aunmenta mi fe para reconocerte en la eucaristia, en los rostros concretos de aquellas personas que Tu mismo me pones en mi camino. dame la gracia de dar testimonio con mi vida como tambien con las palabras que el Santo Espiritu de Dios pone en mi Corazon y en mis labios, ayudame a ser coherente, a orar e interceder por otros y que no me quede callado frente a esta maravilla de haberme encontrado con el resucitado, y decir firmemente " Jesus es el Señor, Amen.
Dios los bendiga!!!
Tarea: Interceder ante Dios por los hermanos que sufren
--
† Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
Sandra Yudy Zapata Escudero
Sandra Yudy Zapata Escudero
No hay comentarios:
Publicar un comentario