Romanos 7,18-25a
Hermanos: Sé muy bien que no es bueno eso que habita en mí, es decir, en mi carne; porque el querer lo bueno lo tengo a mano, pero el hacerlo, no. El bien que quiero hacer no lo hago; el mal que no quiero hacer, eso es lo que hago. Entonces, si hago precisamente lo que no quiero, señal que no soy yo el que actúa, sino el pecado que habita en mí. Cuando quiero hacer lo bueno, me encuentro inevitablemente con lo malo en las manos. En mi interior me complazco en la ley de Dios, pero percibo en mi cuerpo un principio diferente que guerrea contra la ley que aprueba mi razón, y me hace prisionero de la ley del pecado que está en mi cuerpo. En resumen: yo, de por mí, por un lado, con mi razón, estoy sujeto a la ley de Dios; por otro, con mi carne, a la ley del pecado. ¡Desgraciado de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo presa de la muerte? Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, y le doy gracias.
Palabra de Dios
Hoy la primera lectura nos muestra cómo el pecado no nos debe llevar a que nos enterremos con el dolor, sentirnos culpables y achantados, sino que más bien debemos reconocer como Dios desde su inmensa misericordia nos salva y además que por haber pasado por el pecado nos trae una gran experiencia para nuestra vida.
Que nos sucede a nosotros los seres humanos, que tomamos decisiones equivocadas impulsados por el ego, por el temor, por el sentimiento enfermizo o porque no somos personas de carácter. Dios nos quiere libres y desde esa libertad que Él mismo nos da, El nos llama. Pero el ser humano utiliza esa voluntad, esa libertad casi siempre desemboca en la esclavitud y la opresión. Decimos a boca llena que somos libres porque hacemos que se nos viene en gana, que nadie nos manda, pretendemos ser dioses y estamos convencidos que llegaremos a serlo, pero en el fondo somos esclavizados de nuestros propios vicios y deseos. Al vivir a espaldas a Dios, hay una ruptura y esa es la causa de las tragedias humanas.
Todos estamos llamados a ser como Dios pero no a ser dioses. Sin embargo, él llega a ser semejante no en la arbitrariedad de su capricho, sino en la medida en que reconoce que la verdad y el amor son a la vez el principio y el fin de su libertad.
Ahora bien, porque el pecado nos trae experiencia en la vida nos preguntaremos? . El pecado tiene como objetivo engañarnos, distorsionar el mensaje de Dios que es verdad. Cuando tu niegas a Dios, también tu te estas negando a ti mismo porque eres creación de Dios Padre. El problema no es eso solamente sino que además esta negación altera profundamente nuestro equilibrio interior.
El pecado es la raíz de la alineación de todos los males y calamidades del mundo. El pecado no solo hace daño al hombre en su ser individual sino que se va esparciendo, contagiando a los demás. Es por eso que ahora vemos temas que van tomando más fuerza como la adopción de bebés en una pareja del mismo género, la eutanasia, manipulación genética, promoción de la igualdad del transgénero, el aborto, etc….
El ser humano desde su origen ha abusado de su libertad alzándose contra Dios y tratando de conseguir sus fines fuera de Él. Pero revisemos cuál ha sido el resultado?
Como dice la lectura, en resumen: yo, de por mí, por un lado, con mi razón, estoy sujeto a la ley de Dios; por otro, con mi carne, a la ley del pecado. ¡Desgraciado de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo presa de la muerte? Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, y le doy gracias.
Salmo 118 " Instrúyeme, Señor, en tus leyes. "
Lucas 12,54-59
En aquel tiempo, decía Jesús a la gente: "Cuando veis subir una nube por el poniente, decís en seguida: "Chaparrón tenemos", y así sucede. Cuando sopla el sur decís: "Va a hacer bochorno", y lo hace. Hipócritas: si sabéis interpretar el aspecto de la tierra y del cielo, ¿cómo no sabéis interpretar el tiempo presente? ¿Cómo no sabéis juzgar vosotros mismos lo que se debe hacer?
Cuando te diriges al tribunal con el que te pone pleito, haz lo posible por llegar a un acuerdo con él, mientras vais de camino; no sea que te arrastre ante el juez, y el juez te entregue al guardia, y el guardia te meta en la cárcel. Te digo que no saldrás de allí hasta que no pagues el último céntimo."
Palabra de Dios
Te alabamos Señor
Estar atentos a las realidades visibles externas y progresivas que van en una dirección y van en contra del evangelio.
Hoy Jesús nos invita a no ser indiferentes frente a los signos visibles y que van tomando fuerza poco a poco y que tienen como fin ir en contra del evangelio. En otras palabras hay que aprender a leer la vida, es decir, a no limitarnos a "escribir" cada día una página de ese libro que es vivir: antes de escribir, ¿por qué no leer un poco?
Hay que ser un poco más críticos y no ser tan pasivos. Cuando estamos en la edad de la niñez o la juventud, a veces tenemos una actitud indiferente a ciertas realidades que vivimos, pero cuando nos volvemos más maduros, somos un poco más conscientes nos volvemos más activos y más participativos en lo que vivimos.
La luz del Evangelio nos ayuda a hacernos esta pregunta "¿Por qué, pues, no juzgan por ustedes mismos lo que les conviene hacer ahora?". La decisión que tomemos ahora nos afectara a futuro, es por eso que debemos ser más atentos, tomar las decisiones más inteligentes a la Luz de la Palabra de Dios, más razonables, poniendo no solo la lógica sino haciendo la voluntad de Dios si es que nos llamamos Cristianos, hay que ser coherentes con lo que creemos. y por último hay que ser responsables. Es decir : despertar y enriquecer nuestra atención, inteligencia, razón y responsabilidad.
Señor hoy me invitas nuevamente a no vivir distraído en este mundo, a que vea y reconozca los signos del mal que van tomando poco a poco fuerza y que van a una dirección como es ir en contra del Evangelio. Dame la gracia de nos ser indiferente a estos signos y que sea más responsable a trabajar en tu misión. Que sea consciente que cualquier decisión que tome hoy me afectara el futuro no solo mío sino de los demás. Llename de Tu sabiduría Divina a través de Tu Palabra y que sea obediente a lo que Tu me dices que haga, como tambien que sea una persona integra con los valores cristianos. No quiero abusar de la libertad que tu mismo me has dado llendome en contra Tu voluntad tratando de conseguir mis fines fuera de Ti. Por eso hoy levanto la voz y mi alma para decirte como el salamista “ Instrúyeme, Señor, en tus leyes. “, porque yo, de por mí, por un lado, con mi razón, estoy sujeto a la ley de Dios; por otro, con mi carne, a la ley del pecado. ¡Desgraciado de mí! ¿Quién me librará de este cuerpo presa de la muerte? Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo, y le doy gracias. Amen, Amen, Amen.
Dios te bendiga,
Alabado sea Jesucristo!!!
Tarea : Saber conciliar
--
† Que la paz y el Amor del Señor permanezca en tu corazón como en el mio...
Sandra Yudy Zapata Escudero
Encuentranos en : www.catolicosregina.com
Siguenos en facebook https://facebook.com/orandoyviviendo/
Sandra Yudy Zapata Escudero
Encuentranos en : www.catolicosregina.com
Siguenos en facebook https://facebook.com/orandoyviviendo/
No hay comentarios:
Publicar un comentario